Expresión Barroca

Arquitectura Barroca

La arquitectura Barroca es resumen y paradigma del espíritu de la "civilización del barroco".

En ella se adoptan las líneas curvas frente a las rectas por generar aquéllas mayor dinamismo y expresividad.

Las fachadas adquieren la máxima importancia pues en ella se suelen volcar los mayores empeños decorativos mediante numerosas cornisas y columnas griegas, romanas y salomónicas. Por el predominio de los elementos decorativos sobre los constructivos, se puede afirmar que el estilo barroco más que un estilo de arquitectura es una forma de decoración arquitectural.
Una de las preocupaciones del Barroco son los grandes recintos pùblicos urbanos. Es frecuente que el las ciudades màs importantes se lleven a cabo plazas mayores de enorme superficie.

Principales personajes de la Arquitectura Barroca fueron Borromini y Bernini.





Escultura Barroca

La escultura barroca tiene una serie de características propias:
• Predominio de los temas religiosos.
• Realismo. Para extremar el realismo de las figuras se recurre a postizos como el empleo de pelo real, corona real, ojos y lágrimas de cristal, etc. Se llegaron a crear imágenes de vestir, en las que se realizaban con minuciosidad cabeza, manos y pies para vestirlas con ropa real.
• Empleo de la madera policromada como material preferido.
• El cliente más importante es la Iglesia y en segundo lugar la Corte.
• Las obras decoran retablos, sillerías de coro y los famosos pasos de Semana Santa.
• Se produce la decadencia de la escultura funeraria.


Pintura Barroca


El siglo XVII es por excelencia el Siglo de Oro de la pintura española, y en él florecieron la mayor parte de las escuelas artísticas nacionales, siendo la valenciana una de las más fecundas. Su clientela eclesiástica y conventual promoverá aparatosos lienzos de altar, en los que triunfa de manera portentosa la gloria de los santos, representados con óptica naturalista y conmovedores efectos de luz.

El predominio del tenebrismo naturalista de influencia italiana había empezado tímidamente en El Escorial, y llega a Valencia de la mano de Francisco Ribalta, quien iniciará una escuela particularmente definida tras su establecimiento en esta capital en 1599. No menos importante está su hijo Juan Ribalta, con obras de gran impacto como la Santa Cena deudora de la ejecutada por su padre para el Colegio de Corpus Christi; o el majestuoso lienzo de los Preparativos para la crucifixión, firmado con dieciocho años de edad y pintado para el Monasterio de San Miguel de los Reyes,

De las escuelas internacionales del Barroco hay que mencionar la italiana, con figuras principales como: Luca Giordano, con el Martirio de San Bartolomé; las pinturas mitológico decorativas de Valerio Castello, como el Rapto de las Sabinas y Domenico Fiasella, con un decorativista Festín de Baltasar exponente del barroco genovés.


Música Barroca

El estilo llamado Barroco musical se caracteriza estéticamente por la preeminencia de lo emocional sobre lo racional, por el género vocal recitativo, en el cual el ritmo de la palabra determina el discurso melódico -La música ha de ser sirviente de la poesía- y por un auge de la música instrumental pura, es decir, sin relación con consideraciones ideológicas que se deriven de un texto, o funcionales como en el caso de la música de danza.
En esta época se desarrollan la sonata, el concerto grosso y el ballet francés.

El periodo dentro de la historia de la música que abarca el barroco se extiende desde el 1600 hasta aproximadamente el 1750, que es la fecha que se toma como final de este periodo y que coincide con el fallecimiento de Bach.

Su característica primordial es la preponderancia de los aspectos emocionales e impulsivos, más cálidos, por sobre los aspectos racionales o fríos. La influencia de estos conceptos en la música proviene de las líneas de pensamiento filosófico de esos tiempos. Posteriormente a esta época, aparece el período de la música clásica propiamente dicha.
Entre los instrumentos de teclado que se desarrollan en esa época, el más destacado es el clavecín, aunque en esos tiempos un italiano llamado Bartolomeo Cristófori estaba dando las pinceladas finales para uno de los inventos más grandiosos de toda la historia de los instrumentos musicales: el piano.